LA VIDA ES UNA NOVELA, DE ALAIN RESNAIS
La vida es una novela es un largometraje dirigido por el cineasta francés Alain Resnais en 1983. A través de tres historias situadas en un castillo pero desarrolladas en distintos tiempos, el director refleja los sentimientos enfrentados de los personajes. La alternancia en la representación del presente, pasado y tiempo fantástico y la unión de estos mediante mecanismos, que van desde recursos escénicos o narrativos hasta aspectos técnicos, interactúan convirtiéndose en parte fundamental de la película.
Tres historias que se desarrollan en diferentes tiempos forman La vida es una novela. El presente conduce el relato y hace que, tanto el pasado como el tiempo de la fantasía, se conecten formando un relato unitario en su conjunto. La alternancia en el orden de los tiempos de la narración es la base del film ya que no hay ninguna relación cronológica entre las historias. A medida que avanza la trama, la temática de los tres tiempos se unifica dando coherencia al relato al llegar a un punto común en esta historia de presente, pasado y fantasía.
UNIENDO TIEMPOS IMPOSIBLES
El desarrollo en el mismo espacio y tiempo de dos acciones de tiempos diferentes es una de las características principales de la película. La representación de un tiempo imposible, que pasa desde el presente al tiempo de fantasía o desde el pasado al tiempo actual, se realiza mediante recursos escénicos propios del teatro como el estatismo y la iconografía. El vestuario, el maquillaje, la música y la actuación de los personajes añaden significados y caracterizan los tres tiempos, estableciendo diferencias para el reconocimiento de cada periodo.
Las líneas narrativas representadas en La vida es una novela se unen mediante una serie de mecanismos como la equivalencia arquitectónica, que relaciona a los personajes de los distintos periodos en un mismo espacio, consiguiendo una transición temporal en la misma secuencia. El montaje, el sonido, el tema en torno al cual gira la película o los diálogos son otros de los elementos fundamentales en la relación de historias. El juego de tiempos, su relación y la representación de estos hacen del film una muestra de relato basado en la falta de cronología pero en el que todas sus partes están relacionadas formando una unidad.
Tres historias que se desarrollan en diferentes tiempos forman La vida es una novela. El presente conduce el relato y hace que, tanto el pasado como el tiempo de la fantasía, se conecten formando un relato unitario en su conjunto. La alternancia en el orden de los tiempos de la narración es la base del film ya que no hay ninguna relación cronológica entre las historias. A medida que avanza la trama, la temática de los tres tiempos se unifica dando coherencia al relato al llegar a un punto común en esta historia de presente, pasado y fantasía.
UNIENDO TIEMPOS IMPOSIBLES
El desarrollo en el mismo espacio y tiempo de dos acciones de tiempos diferentes es una de las características principales de la película. La representación de un tiempo imposible, que pasa desde el presente al tiempo de fantasía o desde el pasado al tiempo actual, se realiza mediante recursos escénicos propios del teatro como el estatismo y la iconografía. El vestuario, el maquillaje, la música y la actuación de los personajes añaden significados y caracterizan los tres tiempos, estableciendo diferencias para el reconocimiento de cada periodo.
Las líneas narrativas representadas en La vida es una novela se unen mediante una serie de mecanismos como la equivalencia arquitectónica, que relaciona a los personajes de los distintos periodos en un mismo espacio, consiguiendo una transición temporal en la misma secuencia. El montaje, el sonido, el tema en torno al cual gira la película o los diálogos son otros de los elementos fundamentales en la relación de historias. El juego de tiempos, su relación y la representación de estos hacen del film una muestra de relato basado en la falta de cronología pero en el que todas sus partes están relacionadas formando una unidad.